Tina Medicinal
Los aceites esenciales son lo mejor para utilizar en la tina. Ahí se ponen en contacto con tu piel y los poros abiertos que reciben todos sus beneficios así como con tu sentido del olfato con sus poderes de aromaterapéuticos.
Pasa que ni cuenta nos damos de lo cansadas que podemos estar. Pasamos todo el día del tingo al tango y por la noche caemos como zopapos en la cama, ni buenas noches alcanza uno a decir.
Por eso, he aprendido a abrir estos espacios en mi vida, no solo para compartir la teoría y escribir bonito sobre ella sino porque, en verdad, siento el amor que recibo de mi misma cuando pienso en mi y me preparo rituales con intención.
No necesitas ser una bruja profesional para crear un ritual en tu baño. De hecho, tampoco necesitas una tina (aunque en este caso específico sí), lo que quiero expresarte con este enredo es que no necesitas nada para entrar en ceremonia contigo misma. Sin embargo, el ritual, el poner determinadas cosas hace que la intención se magnifique.
Me gusta prepararme una tina con un propósito y mientras la preparo, pienso en ese propósito que tengo, esa intención por la cual estoy preparando ese espacio para mi. Disfruto de darme mi tiempo, poner música, encender velas, invitar a mis cuarzos a que infusionen el agua tibia, y algunas ramas frescas de hierbas de olor que me sirven para relajar el cuerpo. Me preparo un té tibio o me sirvo una copa de vino (más seguro una copa de vino ja!)
La vez que hice esta tina que les comparto, puse una meditación de sanación del vientre y fue mágico. Puedes escoger una meditación de mi SALA DE MEDITACIÓN y hacerla en contacto con el agua. ¡Me cuentas cómo te va!
Esta tina es solo un ejemplo de los aceites y las ramas que puedes usar, pero como siempre, mi motivación es a que seas creativa y utilices lo que tienes o comiences a pensar en comprar de a pocos cositas que te sirvan para este tipo de rituales.
Mezcla tus aceites esenciales y calcula según el tamaño de tu tina. La mía es una tina pequeña y con 30 gotas de aceites en total, es más que suficiente. Si tu tina es más grande agrega poco a poco más aceites para llegar a tu medida perfecta. No uses aceites como eucalipto o canela (breathe, peppermint, melaleuca, cassia) si eres sensible a la piel ni con niños pues les puede arder su colita (historia real). Te recomiendo aceites florales y blends relajantes, también los aceites de raíces son lindos para la tina.
Puedes usar cualquier tipo de sales: marinas, del Himalaya, Epsom o las que quieras. Las Epsom son muy buenas para relajar los músculos pero si no tienes Epsom puedes usar sal marina de cocina. Trata de no usar la refinada.
Te recomiendo estos tres aceites esenciales para usar en tu baño relajante:
Serenity es un blend que predominantemente huele a lavanda, pero tiene otros aceites que ayudan a la relajación. Balance es un blend de doterra que te ayuda a sentirte más anclada, más presente y en tu cuerpo, evocando tu balance natural. Y por último Vetiver que es un aceite que es un somnífero natural, lo mejor para ayudarte a descansar.
Siempre te recomendaré que utilices lo mejor, y aunque hay diferentes marcas de aceites esenciales buenos, yo utilizo doterra como mi marca principal debido a su calidad y su grado terapéutico.
Si quisieras aprender sobre aceites esenciales o quieres asistir a una clase virtual, déjame tus datos y cuando organice la siguiente clase para tu país, te hago llegar la invitación.
Déjame tus comentarios ¿Cómo te haces tus tinas relajantes? ¿Algún tip que nos quieras compartir?
Te mando todo mi amor,
Annie.