Amor y Sexualidad consciente

Ayer en el Club de Lectura de los miércoles por Instagram @AlasdeOrquidea hablamos sobre el amor consciente y su comparación con el amor mágico.

Personalmente y como terapeuta encuentro como clave la consciencia en nuestras relaciones amorosas y afectivas, de hecho en cualquier tipo de relación. La consciencia es la que nos permite estar presentes en nuestro cuerpo mientras transitamos emociones y pensamientos para así poder evaluar qué camino quiero tomar.

Los problemas que tenemos en pareja son porque falta consciencia, porque nos echamos culpas y nos señalamos, porque no queremos ser el que “se equivocó” porque como somos sever@s juzgando entonces creemos que nos juzgará igual nuestra pareja y así comienza un ciclo muy normal de discusión y demencia que no nos lleva a ningún lado.

El amor consciente es aquel que ve primero su rol dentro de la situación, para bien o para mal, teniendo en cuenta que nada está mal, todo es como tiene que ser, tú solamente decides qué hacer y hacia dónde moverte.

Aquí la comunicación es vital. De nada sirve estar consciente de cómo me siente respecto a x o y, si no puedo expresarlo. La consciencia por sí sola, es puro saber pero y… ¿qué vamos a hacer al respecto?
La expresión va antes que la acción regularmente. Si no hay expresión entonces probablemente lo que haya es una reacción.

Y las reacciones casi siempre nos meten en problemas y terminamos diciendo: no es lo que quería decir y, a lo mejor sí, pero en el calor de esas emociones que nos hacen decir cosas que en el momento queremos decir pero que después nos arrepentimos porque en nuestros 5 sentidos, no diríamos.

En el sexo pasa lo mismo. Nos callamos muchas cosas porque no sabemos cómo abordarlas, entonces preferimos ignorarlas y aprendemos a convivir con la incomodidad; de hecho hasta resulta más cómoda la incomodidad que poner nuestra mente en orden para expresarnos ¡eso sí que es incómodo!

No digo que sea fácil comunicarse, pero te aseguro que tampoco es fácil no hacerlo y los resultados difieren bastante en ambas decisiones.

Si te comunicas, estarás incomodx (al principio) pero podrás llegar a acuerdos que te hagan el camino más placentero. Si no te comunicas estarás incomodx (por siempre) y tendrás que tragarte una y otra vez eso que no solo no te gusta sino que con la repetición, te choca.

Esta es la receta para la reacción, pues un día tienes los astros mal alineados y dices una barbaridad que podía haber sido evitada si te hubieras expresado a tiempo.

Cuando digo “al principio” es porque la comunicación es incómoda solo cuando estamos aprendiendo a hacerlo. Estamos aprendiendo a modular la voz para no ser agresivxs, a encontrar las palabras con menos filos posibles porque si lo que quieres es comunicarte entonces lo primero es crear un espacio seguro, para ti y tu preja.

La comunicación no es difícil, solo tiene su chiste. Primero no busques el peor momento para querer comunicarte, si tu pareja está trabajando o ejercitándose o en algo específico, acuerden un momento en el que puedan hablar. Muchas veces las cosas sexuales es mejor no hablarlas justo en el momento, otras veces sí, para saber cuál es el mejor momento piensa en la otra persona tanto como en tu necesidad de comunicarte.

Si encuentras un momento en que la otra persona te puede poner toda la atención entonces tendrás a alguien receptivo frente a ti y eso está de tu lado. No te expreses sobre cosas sensibles si la otra persona está estresada en ese momento. Busca el momento adecuado para lxs dos.

La consciencia es una herramienta divina para el amor, personalmente me ahorra muchos dolores de cabeza y he visto deboronarse frente a mi potenciales situaciones de pelea con consciencia de ambos. Solo es cuestion de querer hacerlo y comenzar a practicar.

La consciencia es una práctica, igual lo es la comunicación asertiva y amorosa. Yo les recomiendo a las personas que quieren comenzar a trabajar en su comunicación que le cuenten a su pareja sus planes y que le pidan su ayuda en forma de paciencia, de recorderis amorosos y reconocimiento cuando sea necesario.

A mí nada me ayuda más que hacer eso porque mi partner sabe que yo deseo transformar eso pero que me sigo equivocando, su paciencia hace que mi aprendizaje tenga un terreno seguro y eso lo agradezco trabajando más fuerte en mi presencia, pues solo en presencia puedo cachar mis pensamientos y, sin lugar a duda, controlar mi reacción.

Cuando una pareja está trabajando en terapia juntos es más fácil pues ambos tienen establecidas sus reglas de juego y se vuelven un equipo para vencer sus dificultades de expresión. Esto siempre va a repercutir en la vida persona de cada uno, eso es lo hermoso, si nos aprendemos a comunicar con nuestra pareja, entonces nos aprendemos a comunicar con nuestra familia, amigxs, colegas etc

Espero que te sirva,

Annie