La bella y las Bestias #LBYLB

Isabela León.

Siempre que pongo un punto final a un proyecto, me llega una sensación de nostalgia que añadida al día lluvioso que hoy hace, da como resultado una bomba especial. Perfecta para escribir, eso sí.

La Bella y las Bestias es una teleserie que comenzamos a escribir Juanca y yo, el año pasado. Casi un año creando, conviviendo y dialogando con todos estos personajes que fueron creados desde fibras profundas que duelen, con realidades crudas que vivimos en México. 

Por supuesto, al ser ficción, es simplemente una premisa: ¿Qué pasaría si matan a tus padres, a tu mejor amiga y hasta a tu perro y luego la justicia del país te da la espalda? ¿Qué pasa si tu vida se viene abajo un buen día porque poderosos corruptos de las más altas esferas, deciden que tus padres les estorban para seguir haciendo de las suyas?

Cuando Juanca comenzó a gestar esta historia, siempre tuvo en la mente dejar algo: dejar reflexiones, dejar cuestionamientos profundos sobre la sociedad y las formas en las que nos relacionamos con el poder, vista desde los ojos del sistema mexicano.

Esta historia está escrita con las tripas, con el corazón y el alma.  Y es por eso que hoy, que terminamos este proyecto y ponemos punto final a esta historia quiero hacer un poquito de honor a este universo que me sostuvo durante este último año.

Escribir es una forma de parir, vernos reflejados como autores en nuestros personajes, escucharlos pensar como uno o pensar en contra de lo que uno mismo piensa. Los personajes son esas voces de nuestro mundo de imaginación que van tomando cara, forma, y de repente, comienzan a hablar solitos y uno como escritor es solamente el canal.

Con cada proyecto aprendo y La Bella y las Bestias me deja 80 capítulos más de madurez para mi oficio, me deja la profunda compenetración con estos personajes que los siento metidos en mi piel, en mis células. 

LBYLB me recuerda confortantemente el trabajo en equipo, la compañía creativa y deliciosa de Laura y Vincenzo de W Studios, con quienes disfrutamos de tardes completas creando situaciones, personajes, historia. Gracias a ellos porque trabajar en cercanía fue un verdadero placer y crecimiento para mi. 

Y como siempre, trabajar al lado de mi mentor, de mi maestro y amor de mi vida, que con cada proyecto me monto en otro escalón de admiración por él, por esa cabeza que tiene llena de ideas apasionantes, por su filigrana y detalle al crear estas historias que hilvana como todo un artesano de este oficio. Es inspirador para mi escribir a tu lado, amor mío. 

Gracias Isabela, Juan Pablo, Penélope, Mike, Simón, Andrea, Emanuel, Emilia, Ricardo, Kike, Louise, María, Ángel, Felipe, Alicia, Rodrigo, Chucho, Ofelia, Castor, Norman, Horacio, Madame, Leonor, Omar,  Toño Calzones, Toñito, Inés, Pascual, Darío, Vero, Susi, Aleja, Yami, Joyera, Carlos,  Cafetero, Marcia, Daniel, Octavio, Abelardo, Graciela, René, Bibiana. 

Gracias a los productores, a W studio, Lemon Studios, a directores, fotógrafos, actores, casting, scouters, asistentes, arte, vestuario, maquillaje, efectos especiales, stunts, editores, musicalizadores, en fin, seguramente olvido figuras de participación pero básicamente a todas las personas involucradas en este proyecto, agradezco desde el fondo de mi corazón por el amor impreso, la pasión y la emoción que nos ha generado a todos participar en él. 

Pongo mi punto final, feliz.

¿Continuará?

Ana Bolena ∞ AlasdeOrquidea