Gazpacho tradicional

Foto: AlasdeOrquidea

Por aquí, por mis rumbos, hace un jijo de la shin... calor –honor al padre sol pero OMG– que el solo pensar en una sopa caliente, me da algo. 

Sin embargo, Mafalda y yo diferimos en una sola cosa y esa, es la sopa. Amo la sopa, he aprendido a comer sin ella desde que vivo en Miami por el clima, pero cuando vivía en CDMX, una comida sin sopa me parecía un insulto; tanto como a una amiga la insultaba que le dieran gelatina de postre... cada quien sus rayes culinarios, uno de los míos es la sopa.

Si algo amo del "invierno" de Miami, y nótese que lo pongo en comillas porque después de experimentar un invierno en México, estos de Miami son papita, en fin, es solo en esa época que puedo cenar sopa de tomate y sandwich –otra de mis adicciones culinarias. 

Aunque ninguna sopa fría da ese calor de hogar de un buen plato de sopa humeante, para estos calores que se vienen en verano, les comparto esta receta de Gazpacho, muy sencilla de hacer.

La puedes meter al refri y dura hasta una semana, es deliciosa, refrescante y un excelente snack. Mira este video de 58 sec:

5 tomates no muy verdes pero tampoco muy maduros * 1 pimiento verde * 1 pepino pelado y sin semillas * 1 chile verde * sal y pimienta al gusto * un chorrito de aceite de oliva * 1/2 aguacate 

Es muy fácil cosechar chile verde y habanero, yo tengo buenas cosechas con solo 2 arbolitos de cada uno. Son plantas relativamente pequeñas que solo necesitan una ventana o un balcón con sol durante 6 horas y que su tierra esté húmeda y bien drenada. 

Todo a la licuadora menos el aceite, sal y pimienta. Licúa pulsando, de tal forma que no quede completamente líquido sino con trozos. Al final añade aceite, sal y pimienta al gusto.

Mete al congelador 30 minutos. Adorna con tomate en cuadritos y el aguacate. 

Apuesto a que si Mafalda la prueba, se reinvindica con la sopa...

Con todo mi amor,

Anna Bolena

Ana Bolena Meléndez

Soy Ana Bolena, pero dime Annie. Me certifiqué como Terapeuta en Sexualidad y Menstruación porque mi propia búsqueda de sanación me llevó a explorar a fondo el poder del cuerpo femenino. Durante años guié a mujeres a reconectar con su sensualidad y energía femenina, pero entonces llegó la Perimenopausia y todo cambió. Me di cuenta de que este camino necesitaba algo más que sensualidad: necesitaba claridad, sostén y un estilo de vida que nos ayude a vivir esta etapa con poder. Así que me metí de lleno a entenderlo, a experimentarlo, y ahora estoy aquí para compartir lo que he aprendido. La Peri no tiene por qué ser un caos, puede ser tu mejor transformación.

http://www.milunayoni.com
Anterior
Anterior

Después de la tormenta

Siguiente
Siguiente

Pesto de Cilantro & Semillas de Calabaza